Frías lleva desde el año 2002, coincidiendo con la conmemoración del Octavo Centenario de la Concesión del Fuero a la Ciudad, dentro de la lista de localidades que en verano sacan su historia al escenario encarnada por los propios vecinos. La próxima cita es muy inmediata, el viernes 10 y el sábado 11, que es cuando más de 50 vecinos representarán la obra La Batalla del Capitán escrita por José Ignacio Martínez y dirigida por Adolfo Barrios. Esta pieza está basada en el mismo hecho histórico que la Fiesta del Capitán que se celebra cada mes de junio en la ciudad y que está cataloga como Fiesta de Interés Turístico Regional.
La concejala de Cultura, Lourdes González, resalta que la escenificación se realiza en el Castillo, «un marco incomparable», y subraya el «esmero» del equipo humano que está detrás del espectáculo cuya organización corre a cargo del Ayuntamiento, Asociación Frías Medieval y Amigos de Frías.
Adolfo Barrios, director del montaje desde su primera edición hace ahora once años y con una larga trayectoria como director y productor teatral, explica que la obra aborda un asunto de total actualidad, «la pérdida de derechos de un pueblo que acaba en una rebelión popular» y confirma la gran implicación de la gente de Frías en el proyecto. Del Castillo dice que es un gran «aliado» en la puesta en escena y explica que el evento dispone de las últimas tecnologías digitales al servicio de la iluminación y el sonido. «A la gente que está pensando en venir le diría solamente que lo hagan porque se va a quedar maravillada; así, sin adelantar más detalles», apunta.
Desde la Oficina Municipal de Turismo afirman que el espectador se trasladará sin darse cuenta 800 años atrás, disfrutando de la representación medieval y también de las calles empedradas, de las casas colgadas, del puente romano sobre el Ebro y de otros rincones llenos de encanto de la localidad.
La obra
En el año 1446, el rey Juan II, incumpliendo los juramentos hechos por sus antepasados, entrega la ciudad a su Mayordomo Pedro Fernández de Velasco a cambio del Castillo de Peñafiel, y éste no tarda en quebrantar los privilegios concedidos gracias los fueros entregados por el Rey Alfonso VIII a la ciudad más de dos siglos atrás.
Tras una serie de acontecimientos históricos, se llega a cercar a la ciudad de Frías y los combates se suceden. Parece que todo esto está perdido, y no queda sino rendirse a las fuerzas sitiadoras. Sin embargo, cabe la posibilidad de una última batalla…una batalla que demuestre a Pedro Fernández de Velasco que la ciudad no se entregará fácilmente.
Diario de Burgos