De Frías se pueden decir muchas cosas y todas bonitas: que es un bellezón, que parece sacada de un cuento o que tiene embrujo. Famosos como el cantante y político José Antonio Labordeta o la periodista Rosa María Calaf la  han descrito, tras conocerla, como «coqueta» y como «un regalo que asombra permanentemente», respectivamente. La hermosura de su trazado medieval nunca deja indiferente a nadie y así lo han reconocido las instituciones a lo largo de los años.


La localidad alcanzó el Primer Premio Provincial de Embellecimiento en 1976, el Primer Premio Nacional de Turismo en 1980 y el Premio C de Turismo de Castilla y León 1994. En su rico pasado gozó de una próspera artesanía que abastecía a los pueblos del contorno y a comienzos de la  Edad Media llegó a alcanzar los 2.300 habitantes. Hoy, Frías es un municipio con cerca de trescientos habitantes que se afana en agradar a los más de 40.000 visitantes que recibe anualmente y lo hace con su encanto heredado pero también ampliando recursos e infraestructuras.


Los turistas no deben perderse el casco antiguo y edificios de interés como el Castillo, la Muralla de la Muela, las iglesias de San Vicente y San Vitores, los molinos harineros, los conventos de Santa María de Vadillo y San Francisco, las puertas de la ciudad, el recinto amurallado, las casas colgantes, la judería, la casa cuartel, el Ayuntamiento y el lavadero. Y por lo que respecta al entorno, el visitante debe acercarse hasta Tobera, Quintanaseca y el puente sobre el río Ebro. Otro de los grandes atractivos de la zona lo constituyen las cascadas del río Molinar.


La localidad cuenta con varios restaurantes, hostales, casas rurales y bares y también con una empresa de ocio activo. Además, recientemente, se ha abierto un párking para autocaravanas con 30 plazas. Pero en Frías aún hay más. Las actividades de sus dinámicos colectivos como Frías Medieval, Asociación Amigos de Frías, Asociación de Jubilados El Castillo y Asociación de Mujeres Luna que a lo largo del año, según explica fuentes municipales, hacen un gran esfuerzo para organizar actividades culturales y de ocio de distinto signo. El verano es, sin duda, el momento del año más animado en Frías y de ello se encarga, sobre todo, la Asociación Amigos de Frías que programa ferias, concursos, ciclos musicales, citas teatrales, rutas de senderismo y talleres de distinto signo.
Además, es muy destacable la labor de la Asociación Frías Medieval que se encarga de organizar la escenificación vecinal La Batalla del Capitán escrita por José Ignacio Martínez y dirigida por Adolfo Barrios. Esta pieza está basada en el mismo hecho histórico que la Fiesta del Capitán que se celebra cada mes de junio en la ciudad y que está cataloga como Fiesta de Interés Turístico Regional. Otro de los eventos que cada día está suscitando mayor interés es el denominado Terrorifrías, que hasta ahora solo se hace en noviembre pero que dado su éxito es posible que ofrezca varias ediciones al año.

Los proyectos

En la ciudad, los proyectos no cesan. En febrero de 2013, estará presente por primera vez en  la Feria Turística de Navartur que se celebrará en Pamplona. El objetivo es abrirse a nuevos mercados turísticos y además no acudirá sola ya que compartirá stand con Oña y Poza de la Sal. Por otro lado, el Ayuntamiento prevé
abrir una nueva sala de Exposiciones en el Palacio de los Salazar donde se reunirán  elementos tradicionales de la ciudad. En materia de infraestructuras, el Consistorio ofrece una parcela gratuita de 2.000 metros cuadrados   para ubicar un hotel.  Toda una oportunidad para posibles inversores. 

Fuente de la noticia: 

M.J.F. / Briviesca

Diario de Burgos