En los primeros meses del año se está registrando un incremento del 50% en las visitas • Los más habituales son vascos, castellanos y madrileños • Hay quienes llegan por curiosidad, por recomendación o por afán de viajar
Frías está registrando un importante incremento de visitas turísticas en los primeros meses del año con respecto al ejercicio anterior en las mismas fechas, concretamente un 50% más. El trabajo de la Oficina Municipal de Turismo está dando sus frutos y también la permanente actualización de la página web. Durante el año 2010, se acercaron hasta la ciudad alrededor de 30.000 personas, dato casi idéntico al registrado en el ejercicio anterior y que significa que la crisis no ha ‘golpeado’ el gran atractivo con que cuenta la ciudad. Por procedencias, el 35% llega del País Vasco, el 25% de Castilla y León, el 10% de Madrid y el resto, de otras comunidades españolas y del extranjero. «Desde 2008, año en el que comienzan a ser cuantificadas estas visitas, hasta enero de 2011, la Oficina de Turismo ha recibido a más de 200.000 personas, de las cuales 90.000 han sido usuarios de alguno de los servicios que esta oficina oferta: visitas al castillo o a toda la ciudad», indican los responsables de la misma, Miguel Ángel Antolín y Marta Serrano.
El esfuerzo que la Oficina de Turismo de Frías está realizando se verá potenciando este año con la publicación de nuevo material impreso y audiovisual, con la creación de nuevos espacios expositivos y también con la innovación dentro de los servicios que ofrece, tanto en las visitas guiadas a toda la ciudad, como en los recorridos por el propio Castillo.
Los turistas que se acercan hasta la localidad presentan distintos motivaciones y perfiles. Hay quienes llegan por curiosidad, por recomendación o por su afán de conocer una ciudad de auténtico sabor medieval. Entre los que llegan se encuentran familias, grupos de amigos, asociaciones de jubilados y colegios. Los dos primeros grupos suelen pasar un fin de semana completo y se alojan en alguna de las casas rurales que ofrece Frías. Aprovechan la estancia para recorrer el entorno, hacer senderismo u otras actividades. Tobera, barrio de Frías, es uno de los rincones más visitados así como su ermita, el Humilladero del Cristo y el puente romano, además del paseo acondicionado con pasarelas y miradores donde se puede disfrutar de los saltos de agua que forma el río Molinar.
Para recuperar fuerzas se puede acudir a los bares y restaurantes de la ciudad, si bien hay quien prefiere comer el aire libre y hacer uso de las mesas situadas junto al río Ebro. Las tiendas de recuerdos son uno de los lugares más visitados. En cuanto a las fechas más señaladas para acercarse a la ciudad, son sus fiestas del Capitán y San Juan, en el mes de junio, y las fiestas del Cristo a mediados de septiembre, sin olvidar agosto, con toda la actividad que se desarrolla en la localidad, y el periodo de Semana Santa, que está a punto ya de llegar.
Según explican desde la Oficina de Turismo, los visitantes muestran gran interés por el tour guiado, ya que en aproximadamente una hora descubren todos los rincones de Frías con una breve explicación. No faltan las fotos en sus calles, junto a las casas colgadas, la iglesia o el imponente Castillo. Otra de las opciones con las que se encuentra el visitante es el recorrido del Castillo, para lo que deben pagar una entrada de un euro y medio aunque hay descuentos para grupos de más de 20 o 50 personas.
En este caso, la visita es autoguiada, mediante paneles informativos, maquetas y maniquíes. Además, se puede acceder a todas las torres, desde donde se divisa un más que atractivo paisaje que quien lo ve por primera vez siempre se lo llevará en la retina.